jueves, 24 de septiembre de 2009
Isabel Villar
Este año he tenido la suerte de coincidir con una exposición de Isabel Villar en mi visita a Madrid. Un verdadero disfrute, aunque yo no tengo muy claro si es naïf o no, es, claramente de estilo naïf, aunque no creo que eso importe demasiado, el caso es que me gusta mucho y como decia Antón Chejov:
"Las obras de arte se dividen en dos categorías: las que me gustan y las que no me gustan. No conozco ningún otro criterio".
En su obra se aprecia siempre un conocimiento y dominio técnico depurado, en el uso de las múltiples perspectivas, en el juego de los colores, en la superposición de los planos. Todo ello confiere una riguosidad pictórica y un buen hacer que se mantiene y es cada vez más patente en su trayectoria.
Tras este buen hacer de la materia, se percibe la cualidad más trascendente en la obra de Isabel: su pesía. Lo poético en sus cuadros es lo que más nos alcanza, trasmitiendo esa serenidad, esa melancolía apacible, ese deseo de paríso casi inalcanzable con el que nos gustaría toparnos de frente, y en el que nos gustaría introducirnos para reposar sin fin.
Cosagrada pintora y artista gráfica española, es quizás una de las mejores representantes del arte Naïf español. El mágico encanto de Isabel Villar se trasparenta en sus imágenes y suceso casi oníricos que pueden recordar el Surrealismo.
"Las obras de arte se dividen en dos categorías: las que me gustan y las que no me gustan. No conozco ningún otro criterio".
En su obra se aprecia siempre un conocimiento y dominio técnico depurado, en el uso de las múltiples perspectivas, en el juego de los colores, en la superposición de los planos. Todo ello confiere una riguosidad pictórica y un buen hacer que se mantiene y es cada vez más patente en su trayectoria.
Tras este buen hacer de la materia, se percibe la cualidad más trascendente en la obra de Isabel: su pesía. Lo poético en sus cuadros es lo que más nos alcanza, trasmitiendo esa serenidad, esa melancolía apacible, ese deseo de paríso casi inalcanzable con el que nos gustaría toparnos de frente, y en el que nos gustaría introducirnos para reposar sin fin.
Cosagrada pintora y artista gráfica española, es quizás una de las mejores representantes del arte Naïf español. El mágico encanto de Isabel Villar se trasparenta en sus imágenes y suceso casi oníricos que pueden recordar el Surrealismo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario