domingo, 11 de julio de 2010
El monje y la mujer
De camino hacia su monasterio, dos monjes budistas se encontraron con una bellísima mujer a la orilla de un rio. Al igual que ellos, quería ella cruzar el rio, pero éste bajaba demasiado crecido. De modo que uno de los monjes se la echó a la espalda y la pasó a la otra orilla.
El otro monje estaba absolutamente escandalizado y por espacio de dos horas estuvo censurando su negligencia en la observancia de la Santa Regla: ¿Había olvidado que era un monje? ¿Como se había atrevido a tocar a una mujer y transportarla al otro lado del rio? ¿Que diría la gente? ¿No había desacreditado la Santa Religión? Etcétera.
El acusado escuchó pacientemente el interminable sermón. Y al final estalló: "Hermano, yo he dejado a aquella mujer en el rio ¿Eres tú quien la lleva ahora?
Dice el místico árabe Abu Hassan Bushanja: "El acto de pecar es mucho menos nocivo que el deseo y la idea de hacerlo. Una cosa es condescender con el cuerpo en un placentero acto momentáneo y otra cosa muy distinta es que la mente y el corazón lo estén rumiando constantemente.
Cuando las personas no dejan de darles vueltas a los pecados de los demás, uno sospecha que esa insistencia les proporciona más placer que el pecado proporciona al pecador"
(El canto del pájaro, Anthony de Mello)
Imagen Cesare Novi en Allarts Gallery
El otro monje estaba absolutamente escandalizado y por espacio de dos horas estuvo censurando su negligencia en la observancia de la Santa Regla: ¿Había olvidado que era un monje? ¿Como se había atrevido a tocar a una mujer y transportarla al otro lado del rio? ¿Que diría la gente? ¿No había desacreditado la Santa Religión? Etcétera.
El acusado escuchó pacientemente el interminable sermón. Y al final estalló: "Hermano, yo he dejado a aquella mujer en el rio ¿Eres tú quien la lleva ahora?
Dice el místico árabe Abu Hassan Bushanja: "El acto de pecar es mucho menos nocivo que el deseo y la idea de hacerlo. Una cosa es condescender con el cuerpo en un placentero acto momentáneo y otra cosa muy distinta es que la mente y el corazón lo estén rumiando constantemente.
Cuando las personas no dejan de darles vueltas a los pecados de los demás, uno sospecha que esa insistencia les proporciona más placer que el pecado proporciona al pecador"
(El canto del pájaro, Anthony de Mello)
Imagen Cesare Novi en Allarts Gallery
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2 comentarios:
Ya había oido esta historia. El pecado sólo está en la mente de cada uno. No hay que estar constantmente dándole vueltas a todo, porque nos olvidamos de vivir. Sólo se puede vivir fluyendo, viviendo, soltando...
Besos
Me encantan tus comentarios mária.
Nos olvidamos de vivir, hay que fluir. Me acabas de recordar a Bruce Lee que decia aquello de: "Be water my friend"...Fluir como el agua..El agua a su paso arratra cosas, tú fíltrala y quédate sólo con lo bueno. Que tu agüita sea limpia y clara!
He leido tu último post...tan triste. Siempre es triste perder a quien amas, pero como bien dices, tu vida es hermosa, no ha estado vacia.Él la ha llenado, te habrá dejado bonitos recuerdos. Quedate con esos, te acompañan siempre.
Un besote grande!!
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