jueves, 12 de abril de 2012
El gorrión del Café de Oriente
¡Como no! Peter portador siempre de buenas noticias, me trae este simpático vídeo.
"Sólo una actitud sensible y culta como la que llevan a cabo los responsables y el personal de este local, es capaz de asociarse con el oportunismo ingenioso y biologico de la naturaleza..
Aqí se produce un hecho insólito, nosotros al menos no conocemos otro igual; sin gorrión amaestrado, sin contratos interesados de hombres y bestias utilizados para el negocio...Felicitémonos, pues justamente en este café, ya hace muchos años comenzó a entablarse un diálogo, ya perdido, entre hombres y animales."
Esta historia la protagoniza un gorrión que se introducía cada mañana en el tradicional Café de Oriente, en la plaza de mismo nombre, y permanecía allí hasta el anochecer. El pájaro era capaz de determinar, según el número de personas que entraran o salieran del local, en qué momento podría acceder al Café atravesando el umbral de las dos puertas de que dispone. Si entraba un solo cliente, una puerta se cerraba antes de abrirse la otra y el gorrión se podía quedar encerrado en los casi dos metros de separación entre ambas, por lo que sólo entraba o salía cuando las dos puertas permanecían abiertas a la par unos instantes.
"Sólo una actitud sensible y culta como la que llevan a cabo los responsables y el personal de este local, es capaz de asociarse con el oportunismo ingenioso y biologico de la naturaleza..
Aqí se produce un hecho insólito, nosotros al menos no conocemos otro igual; sin gorrión amaestrado, sin contratos interesados de hombres y bestias utilizados para el negocio...Felicitémonos, pues justamente en este café, ya hace muchos años comenzó a entablarse un diálogo, ya perdido, entre hombres y animales."
Esta historia la protagoniza un gorrión que se introducía cada mañana en el tradicional Café de Oriente, en la plaza de mismo nombre, y permanecía allí hasta el anochecer. El pájaro era capaz de determinar, según el número de personas que entraran o salieran del local, en qué momento podría acceder al Café atravesando el umbral de las dos puertas de que dispone. Si entraba un solo cliente, una puerta se cerraba antes de abrirse la otra y el gorrión se podía quedar encerrado en los casi dos metros de separación entre ambas, por lo que sólo entraba o salía cuando las dos puertas permanecían abiertas a la par unos instantes.
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3 comentarios:
¡Me ha encantado el video, Victoria!!
Me quedo con una sonrisa en los labios.
Besos
Una historia digna de ser contada. Me alegro de que te marcharas con una sonrisa
;-)
Besos Inma!
ES PRECIOSO Y MUY HUMANO LO DEL PAJARITO.
¿SABES SI SIGUE YENDO? PORQUE YO LE VI HACE MUCHOS AÑOS.
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