domingo, 12 de diciembre de 2010
El mundo de Alice
Continúo con Susanna Tamaro. Escojo el capítulo que nos habla de Il libro de Alice....
Escrito por Alice Sturiale, un ser joven que actualmente, por desgracia, ya no se encuentra entre nosotros. Murió a los doce años durante la mañana del 20 de febrero de 1996 sobre su pupitre, en el segundo curso de Instituto secundario, mientras reía por la frase ingeniosa de un compañero. Alice estaba enferma desde su nacimiento: una de esas enfermedades genéticas-atrofia muscular dorsal- que impiden un desarrollo físico normal y que quiebran el curso del crecimiento antes de tiempo.
Hay que convertirse en buscadores de la esperanza, te escribí en una de mis primeras cartas, y ahora agrego: hay que convertirse en difusores de alegría, cultivarla en nosotros y expandirla al exterior, obrar como lo ha hecho Alice, seguir su ejemplo.
Cultivar la alegría no significa no ver la fealdades y desperfectos del mundo, no significa arrojar sobre la realidad un velo de color de rosa para crear una felicidad ilusoria; por el contrario, vivir en la alegría significa vivir en la consciencia extrema, atestiguando, en el mundo oscuro, una pertenencia diferente del ser. La alegría no es un lenguaje de palabras sino de miradas; la alegría no convence, contagia. La alegría es poderosamente revolucionaria porque revolucionario es el amor sin distinciones al que sirve de vehículo.
Creo que en el camino de la fe, un testimonio de alegría es mucho más poderoso que mil razonamientos. Quien está lejos del Espíritu a menudo imagina que la vida del que cree es una sucesión de deberes casi claustrofóbicos, un horizonte cerrado y sombrío ofuscado por las oscuras nubes del Juicio. ¡Es todo lo contrario! La vida abandonada al Espíritu es una vida de total apertura, de total comprensión: no hay divisiones, separaciones, juicios ni condenas; ya no nos entregamos con cuentagotas, quitamos de los días las sumas y las sustracciones, los “está bien” y los “no está bien”.
En el abandono dejamos de ser nuestros propios jueces. Y cuando uno deja de ser juez, cuando, en vez de analizar e indagar, se acepta a sí mismo y acepta el conmovedor misterio de la vida, entonces en nuestro interior la alegría se inflama con toda su poderosa ligereza. Bien lo sabía Alice, y por eso a los seis años escribió:
Se tu guardi il sole in alto brillerá;
Brillerá se osservi che
Nel mondo c’è un altro mondo
Da amare.
(Si miras el sol brillará en lo alto,
Brillará si observas que
En el mundo hay otro mundo
Para amar)
Confieso que a veces cultivar la alegría me resulta difícil. Hay mañanas que son como un gran agujero negro y se tragan toda esa alegría. Pero caramba!..hay que recuperarla, día a día, minuto a minuto. No dejarse vencer por el desánimo, la apatía o el miedo.
“La tristeza es un hierbajo lozano y persistente pero la alegría necesita cuidos”…es un jardín. Hay que cuidar el jardín. Hay que ver más allá. Ver la belleza en todo.
La vida te da unas cartas, como las juegues es cosa tuya.
Escrito por Alice Sturiale, un ser joven que actualmente, por desgracia, ya no se encuentra entre nosotros. Murió a los doce años durante la mañana del 20 de febrero de 1996 sobre su pupitre, en el segundo curso de Instituto secundario, mientras reía por la frase ingeniosa de un compañero. Alice estaba enferma desde su nacimiento: una de esas enfermedades genéticas-atrofia muscular dorsal- que impiden un desarrollo físico normal y que quiebran el curso del crecimiento antes de tiempo.
Hay que convertirse en buscadores de la esperanza, te escribí en una de mis primeras cartas, y ahora agrego: hay que convertirse en difusores de alegría, cultivarla en nosotros y expandirla al exterior, obrar como lo ha hecho Alice, seguir su ejemplo.
Cultivar la alegría no significa no ver la fealdades y desperfectos del mundo, no significa arrojar sobre la realidad un velo de color de rosa para crear una felicidad ilusoria; por el contrario, vivir en la alegría significa vivir en la consciencia extrema, atestiguando, en el mundo oscuro, una pertenencia diferente del ser. La alegría no es un lenguaje de palabras sino de miradas; la alegría no convence, contagia. La alegría es poderosamente revolucionaria porque revolucionario es el amor sin distinciones al que sirve de vehículo.
Creo que en el camino de la fe, un testimonio de alegría es mucho más poderoso que mil razonamientos. Quien está lejos del Espíritu a menudo imagina que la vida del que cree es una sucesión de deberes casi claustrofóbicos, un horizonte cerrado y sombrío ofuscado por las oscuras nubes del Juicio. ¡Es todo lo contrario! La vida abandonada al Espíritu es una vida de total apertura, de total comprensión: no hay divisiones, separaciones, juicios ni condenas; ya no nos entregamos con cuentagotas, quitamos de los días las sumas y las sustracciones, los “está bien” y los “no está bien”.
En el abandono dejamos de ser nuestros propios jueces. Y cuando uno deja de ser juez, cuando, en vez de analizar e indagar, se acepta a sí mismo y acepta el conmovedor misterio de la vida, entonces en nuestro interior la alegría se inflama con toda su poderosa ligereza. Bien lo sabía Alice, y por eso a los seis años escribió:
Se tu guardi il sole in alto brillerá;
Brillerá se osservi che
Nel mondo c’è un altro mondo
Da amare.
(Si miras el sol brillará en lo alto,
Brillará si observas que
En el mundo hay otro mundo
Para amar)
Confieso que a veces cultivar la alegría me resulta difícil. Hay mañanas que son como un gran agujero negro y se tragan toda esa alegría. Pero caramba!..hay que recuperarla, día a día, minuto a minuto. No dejarse vencer por el desánimo, la apatía o el miedo.
“La tristeza es un hierbajo lozano y persistente pero la alegría necesita cuidos”…es un jardín. Hay que cuidar el jardín. Hay que ver más allá. Ver la belleza en todo.
La vida te da unas cartas, como las juegues es cosa tuya.
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2 comentarios:
Me ha encantado leer esto.
Sigo aprendiendo a no juzgarme, pero es que tengo lo que llamo yo, el abogado del diablo en mi interior y cada acto que hago intenta tirármelo por tierra. "Lo has hecho por...."
"en realidad a lo mejor es egoismo"
"por qué actuas realmente así?" "Hay verdadero amor en todo lo que haces"?
Y así sucesivamente...es que todo me lo planteo, porque me gusta llegar al fondo de todo y no quedarme en la superficie.
Creo que ese abogado del diablo me ayuda a no dormirme en los laureles y a pensar que no está todo hecho.
Ya me he confesado...ahora ponme la penitencia....jajajaja
Besos y sonrisas.
JIJIJI....No te pongo penitencia, por ahora...pero como sigas así voy a erigirme en juez y te condeno a trabajos forzados, "leña al mono hasta que aprenda el catecismo" jajajj
Te confieso que me suena mucho eso que dices, pero cuidadín con ese abogado del "diablo", siempre anda haciendo de las suyas, sembrar dudas es su principal diversión,y consigue destruir lo que podiamos haber construido si no dudaramos. Cada uno da amor en la medida que lo siente por si mismo. No se da lo que no se tiene, pero siempre se puede mejorar.
No dudes nunca!!!
Y no te duermas en los laureles!! Despiertaaaaaaaa!!jjaja...siempre me haces reir.
La verdad es que creo que no hay que hacer un gran esfuerzo. Hay otra vocecita que te habla. Si lo que te dicen te hace sentir bien adelante, si te hace sentir mal, ni la escuches. Si en el fondo lo sabemos.
Besitos y sonrisas para tí tambien
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